(Y cambio el post porque la circunstancia lo amerita)
“Volví hace unos días, y me mantuve en silencio. Observando sin entender, y sin saber que decir. Sin reconocer brillo en mis ojos entre letras en que ya no logro distinguir si me pertenezco o no, es extraño esto.
Cuando partí, comencé a volver. (1) Mi tacto siempre ha sido borroso. Era un no-escape en plena fuga. (2) Tantos meses estuve conteniendo los sentidos. Que tuve que delinear otras vías que iluminaran el camino desde la tierra.
De la determinación de palpar lo real. Salí a mi mundo, que no es mucho, pero es. Volví a mi gente, que no son muchos, pero son. Hay quien desecha una invitación tras otra, y tuve que permitirle marcharse entre enigmas. No habrá quien profiera falta de intentos. Decidí desviarme de la ruta de girasoles que planté alguna vez. Sólo quise empezar a caminar.... dar media vuelta en ninguna tangente [y, sólo empezar a caminar].
Tenía aeropuertos que visité sin haber llegado, confesiones que desabroché en el vuelo de mi pasión, atrapé falsos que sólo yo descubrí pero que nunca me molesté en destapar. Aún así, lancé un beso al viento, desnudé un poco mi alma, y dejé correr algunos cristales sobre mi rostro.
Entonces me fui, viendo luces y medianamente sobria en mis ideas.Y aunque no dibujamos lo mismo sí pintamos en la misma cama y me pregunto cada vez que buscamos el pincel común... si las cosas alguna vez van a volver a sentirse tan reales que parezcan no terminar, si las cosas alguna vez van a ser tan buenas otra vez. (3)
Inhale profundo y me armé de un valor cobarde de vivir lo incierto. No voy a decir que las cosas han cambiado, aún no sé si creo en los cambios, el mundo cambia no nosotros. O quizás el mundo se mantiene y nosotros vemos con otras gafas. Quien sabe. Y aún no se si fue el viaje y eso de pinchar la burbuja sin querer queriendo o amigarme con lo real de mi mundo y comenzar a caminar, o ambas.
Salí con rumbo a lo desconocido, a pesar de un camino tortuoso, llegué a San Juan del Sur, y la finura de sus playas logró enamorarme en cantos de sirena que me convencieron de hacer de éste el único lugar del noseque que andaba queriendo encontrar, que de tan lejano lo sentí mío. (4)
Bailé descalza, como solo los ángeles sin cielo pueden hacerlo. (5) Y sólo después de marcar mis propias huellas en la arena supe que hay pasos que ya no podré dar. (6) Mojar las sin-razones lógicas junto a las con-razones ilógicas (7) sin desesperar, es desatarme con calma el rosario sobre la muñeca que insiste en llenarme el corazón de esperanzas más luminosas que lo real. Y estaba bien, que estuviera ahí, tan fantasma, tan consuelo, tan refugio, tan caricia. Pero es claro que lo inexorable debe ser besado con coraje, para poder continuar. Me dejé arrastrar semidesnuda por las olas, a jirones, y ya no fue problema la elección de preferir no elaborar. Y quizás en el tango sin-sentido (8) se llegue a trazar algún sentido. Y entonces, quizás estar rota no sea tan malo. (9)
En el tope de aquel sin fin de gradas en la colina no había nadie para verme sonreír, pero sonreí. Y aunque el mundo siga durmiendo de noche, la sal, las no-lágrimas, el viento, las guardo en mi mochila. Desempaco entonces el noseque que no encontré. Y voy bailando muy torpemente sobre este no-miedo, rota y a la vez bailando, con mis sonrisas sobre mi cabeza y a la vez, por debajo de mis pies.” (10)
"Seguí hasta la punta de la escalera,
atravezá el camino
y volvé a empezar". (11)
Post del día 9 de agosto de Caperucita’s Town,
Y me pregunto dónde empiezo y termino yo, y dónde empiezan y terminan los demás.
Esta mañana estaba intentando recorrer los blogs que tengo linkeados para comentar, ya que es algo que no hago con detenimiento desde hace mucho tiempo como me gustaría. Cuando llegué al blog de Cape (a quien quiero remarcar desde un principio que me gusta leer, y que me gusta visitar su lugar aunque haga mucho tiempo que no comente) me encontré con esto. Primero fue un “esto me suena” – después fue un “esto es mío.”
No es la primera vez que pasa, el año pasado alguien hizo lo mismo pero con gráficas del sitio. En ese sentido, la gráfica es mucho más volátil que las palabras, pero así no. No sé si es la primera vez que alguien me copia (la palabra plagio siempre me pareció demasiado fuerte) pero sí es la primera vez que lo leo, y tiene tintes que lo hacen mucho más doloroso que simplemente encontrar que alguien copió y pegó mis palabras en algún otro lado.
Referencias:
1 – 2 – 3: No guarantees (Ahead of Schedule) – Publicado el 30 de Diciembre de 2006. (http://kumulonimbus.blogspot.com/2006/12/no-guarantees-ahead-of-schedule.html#comments)
4: Reminiscencia de “que sienta tan ajeno que termine siendo casi mío” – Del hueco que se me forma siempre entre Julio y Agosto – Publicado el 21 de Julio de 2007. (http://kumulonimbus.blogspot.com/2007/07/de-los-caminos-y-las-luces-entre-julio.html#comments)
5: De El hueco que se me forma siempre entre Julio y Agosto.
6: De Hoy | Así | Ya | Sin (O tal vez, con.) – Publicado el 24 de Enero de 2007. (http://kumulonimbus.blogspot.com/2007/01/hoy-as-ya-sin-o-tal-vez-con.html#comments)
7 – 8 : No descubrí referencia, pero el estilo es demasiado mío.
9 – 10 – 11: De Del hueco que se me forma siempre entre Julio y Agosto.
Bien, la verdad es que no sé muy bien por dónde empezar. Me siento bastante impotente. Me gusta mucho cuando algo de lo que escribo trasciende el monitor y puede ayudar a alguien más o al menos hacerlos sentir acompañados, indentificados, pero la verdad es que no quiero ser el alter ego de nadie, a menos que yo elija serlo.
Primero tengo que apuntar a que de citarme, falta la referencia. Está todo bien que usen mis palabras, pero las palabras salen de mí, entonces un link o al menos poner un nombre no le hace mal a nadie. Pero más allá de eso que seguramente pasa y no se ve, creo que se excedieron límites que van más allá de mi nombre o mis mil apodos.
Se usaron varios textos, de épocas diferentes, de estados diferentes, referentes a personas diferentes, y se los aglomeró a todos en una circunstancia que ni siquiera es mía, que ni siquiera conozco, que ni siquiera siento… se insertaron cosas mías entre palabras salidas de otra persona que yo no elegí para que me mechara entre sus cosas, y entre cosas ajenas quedaron momentos de mí, personas mías, sentimientos míos, que se disfrazaron para adaptarse a las necesidades de otro.
Incluso, en el final, hay algo que pareciera ser una cita. Pero el único segmento entre comillas, que seguramente no fue copiado o pegado, tiene una falta de ortografía brutal, y se sabe que cuido la ortografía de lo que escribo con el mismo cuidado que aquello que escribo. A mí las faltas de ortografía me generan rechazo, entonces si me van a citar, copien y peguen, si tengo que generar rechazo prefiero hacerlo por mí misma, y no por lo que se levante de Kumulonimbus en otro lugar.
Y por último, y lo que más me dolió, es que se modifiquen mis palabras. Especialmente las que salen de Del hueco que se me forma siempre entre Julio y Agosto. Ese texto en particular es el que mejor describe lo que me pasa hoy día- tengo miedo. Estoy mal. Estoy triste. Me falta algo. Me falta alguien que no está, alguien que se fue y que sin embargo vive donde yo estoy, alguien que ahora me queda lejos y se siente cerca, alguien que cuando me necesita logra que me estire pero siempre me termino dando cuenta de que no tengo brazos biónicos que se extiendan kilómetros y kilómetros; alguien que cuando estoy mal muchas veces se convierte en el único abrazo que quiero que me den, y a veces hasta llego a sentirlo, me doy vuelta y no está. Me falta alguien que me hizo bien, que me hizo mal, alguien con quien ya pasé lo mejor y lo peor y lo peor solamente logró hacerme dar cuenta de todo lo que representa para mí. Me falta alguien que se fue y no me despedí, y que no tengo ni la más puta idea de cuándo lo voy a volver a ver. Me falta alguien que quiero, que extraño, que necesito, que me importa, que me hace bien y que no es adaptable a lo que le pase a nadie más porque es una persona, no una ficha de ajedrez. Es un hueco que no puedo rellenar ni siquiera escribiendo sobre eso, y que se modifiquen mis palabras para que se adapten a lo que le pasa a otra persona hecha por tierra todo lo que siento yo, todo lo que este hoy representa para mí. Esa modificación de mi original “Bailando muy torpemente sobre este miedo” a este nuevo “Bailando muy torpemente sobre este no-miedo” me corre el eje de lugar. No sé cuáles serán las circunstancias del otro lado, pero sé las mías, y sé las veces que me ahogo a la mañana y me agarra ese miedo de mierda y esas ganas de llorar que largo cuando me quedo sola. No puedo ser el reflejo de nadie más excepto de quien yo elija, y ya elegí a una sola persona y creo que no la voy a cambiar.
Y eso-. Así no. Imagínense que muchas veces ni yo puedo conmigo. Mucho menos voy a poder con las versiones de mí que se puedan hacer encajar en algún otro lado. Puede ser como me acaba de decir el demonio gemelo, quizás sea el mejor halago. Puede también que todos los que repiten “te copian porque sos buena, si fueras mala no te copiarían” también tengan razón. Pero la verdad que por primera vez en la vida, me dan muchas ganas de ser pésima escribiendo.
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Agregado:
Otro caso más y van... Ahora resulta que esta chica se lleva las felicitaciones por algo que escribí yo, y no sólo eso. Parece que hay otra Junio en la ciudad o al menos hay alguien que se hace llamar como yo y lo que es más gracioso del caso, también se copia los comentarios. Un plato.
Me parece que el plagio puede ser la peor falta de respeto que pueden hacerle a uno y, también, me parece que el plagio puede ser de lo que más honra puede reportarte como escritora, la gente suele situarse en algún punto entre estas dos reacciones.
En cualquier caso, siempre existirá la posibilidad de que te copien y más en este lugar tan raro que es internet.