una revolución
sin amor...”
Dale luz al instante
L.A. Spinetta.
Ella está prófuga de su ciudad diáfana.
Ella está presente aunque ausente.
Ella está ¿dónde?
Ella se fue ¿a dónde?
Ella migró ¿por qué?
Ella te dice
que no sabe
pero yo sé que sabe
y te das vuelta
y te saca la lengua
y se ríe
y pensás
que nunca jamás la vas a terminar de conocer…
se agita el rayo,
y no llega a ver el reflejo,
ya partió de allí
y antes de que se escuche el trueno
ya se la ve de vuelta,
así,
como si nada,
fácil como aprenderse la tabla del cinco,
y difícil como pararse con gracia
en puntas de pie
y caminar sin badanas
(ella puede)
que dicen
que está bien,
que está agraciada,
y un poco resfriada,
y un poco acalorada,
y un poco drogada,
tal vez hasta un poco alcoholizada,
otro tanto encapsulada,
pero que está en otro lado,
y no te dice dónde,
y si salís a buscarla te mira desde la terraza,
se ríe
y no se asoma jamás,
no se deja ver,
no se deja encontrar,
no se deja contemplar,
impasible e imposible ella,
(hoy, sólo en este ‘round now’)
porque está bien así,
porque la vida es un juego,
y a ella le encanta jugar.
(y se sabe, que hacen falta muy pocas
muy, muy pocas
razones para que su visión
se llene de rojo
y pierda la cabeza,
hasta que la vuelva a encontrar)
y que no está tan ausente,
que tan sólo está invisible,
y que no está triste,
ni deprimida,
-“de mi hoy / de mí, hoy” te diría-
ni nada
no está nada,
y por eso no hay lugar
pero tampoco hay espacio
y por eso no hay tiempo que se agote
porque el verdadero tiempo recién ha comenzado
y por eso no hay distanciamiento,
porque en verdad está apuñalando fría y brutalmente a la distancia,
y por eso no hay explicaciones,
porque en verdad hay sólo enseñanzas a futuro
y por eso no hay Julieta
y por eso no hay bondi que te alcance hasta ningún lugar
pero siempre algún camino abierto te deja la turra esta.
lo cuida y lo azota a la vez,
y se la ve tan bien plantada,
dejando huellas con cada paso
tan resuelta,
tan muro y tan bandera
tan paz y tan guerra
tan escudo y tan estratega:
tan Berlín,
tan soleada
que justo cuando aparece la sonrisa
de quien dice o piensa entender
ella mira,
se sonríe,
mueve la cabeza
y ya se volvió a ir…
nunca nadie se definió tan bien a sí misma...
tan simple... tan "de frente"...
tan Julieta...
tan Julieta...