“Hasta que luego venga Fuji...” Mañana quizás el tango se acelere, o tal vez se vuelva cada vez más lento. Quizás la tormenta neuronal se malgaste per se en el tiempo. Quizás la pieza sea independiente y eso implique bailar según los mandatos dictatoriales de los caprichos de su propio tempo. Quizás haya sido preciso bailar este tango sin haber aprendido antes cómo hacerlo, como autodidactas que tambalean y trastabillan hasta que llega ese mareo que nada tiene que ver con el alcohol.
Qué se yo…
yo siempre bailé.
Qué se yo, si yo ya no sé,
pero el moretón sobre la tibia se ve tan claro…
Mañana quizás al encontrar este manuscrito turquesa y beige recuerde este último tango en Bi Ei. Mientras tanto, hoy, quizás. Y más tarde; tal vez. Fuji se ha extendido y se ha encarnado en tango e incluso sin sol se baila igual. Se baila en pensamientos. Que son momentos. Elipsis. Mojones del tiempo y del espacio. Cadencia en el tango.
Ya no se,
se no ya, (sobre las neuronas atípicas)
no ya se, (sobre lo que sé)
ya se no, (sobre lo que se agrega)
se ya no, (sobre lo que esperamos del camino)
No se ya.
Y resulta que comienzo y final, en verdad, significan lo mismo.
Bailarina de carne y hueso, un último tango en Bi Ei, una marea neuronal y un simposio sin fin.
Ya no habrá descanso,
ya-no-se
ya-no-habrá
ya-se-no-habrá – descanso.
Hacen falta dos para bailar el tango, alguien me dijo una vez. Pero la pieza no ha de frenar, torremolino, torremolino en Casablanca, y quizás la danza hasta marear sea la coreografía. Ya no sé, pero no se deja de bailar, la pieza es autónoma, independiente de los que se encuentran bailando…
¿Qué ocurrirá cuando el físico al no responder colapse y agote la mente, y a su marea neuronal, al tiempo que por causa del agite se agote el aire, y ya no se pueda respirar?
(anyways,
de no ser por la danza impasible
será por la nicotina
pero al menos se sabe
que una nunca se ha de salvar
ni de las fatalidades
ni de la decisión
de no salvarse a uno mismo
jamás.)
Me he quedado parado en el cordón viéndote, niña, y por Dios que quiero bailar contigo, si puedes, si me dejas, niña,
Amor